viernes, 27 de marzo de 2015

EL COMPORTAMIENTO DE LA ECONOMÍA

EL COMPORTAMIENTO DE LA ECONOMÍA
Germán Palomo García

Aunque el crecimiento del PIB en 2014 fue menor que la cifra del 2013, el que la economía haya crecido 4.6% según el DANE, es un buen resultado a pesar de que en el año pasado se presentaron fenómenos como el bajón de los precios del petróleo y la devaluación que en este 2015 se han consolidado y que causaron   un reacondicionamiento entre sectores y renglones productivos. Del informe del DANE vale destacar tres aspectos: El primero, los resultados del sector industrial que es el que genera valor agregado, aspecto muy importante para nuestra economía ahora que el modelo económico está cuestionado por la dependencia de las materias primas hoy denominadas “commodities”. Durante el proceso contrario al actual de revaluación del peso, la industria fue la gran perjudicada pues la avalancha de importaciones sacó del mercado a muchas unidades de producción por imposibilidad de competir con los productos importados. Aunque las cifras no son contundentes (su producción creció solo 0.2%) detuvo la tendencia negativa de los últimos años y aportó 53.000 empleos nuevos, el que más empleo formal promovió. Esto lleva un mensaje muy importante para el Huila ya que la industria nunca ha sido un renglón importante en nuestro PIB. La única forma de generar valor agregado, uno de nuestros objetivos clave, es estimulando los procesos de transformación y esto requiere industria.
El segundo aspecto a referir es el papel de la construcción. Creció menos que en el 2013, 9.9% frente a 17.5% pero las cifras se consideran moderadas y producto de la desaceleración desde el segundo trimestre del año. Hay una caída en las obras nuevas del 3% y el resultado fue originado por las llamadas obras en proceso que crecieron 9.6%. Aquí en Neiva estamos a la expectativa de saber el impacto que generará la crisis del sector petrolero en los menores ingresos por retiro de trabajadores de buen ingreso que están sintiendo el bajonazo en su capacidad de compra.

Finalmente, el sector agropecuario creció 2.3%, un buen resultado pero su empleo formal disminuyó 1.5% (54.000 empleos). Sin duda, es la oportunidad para “asociar” el agro con la industria, que seguirá fuerte por el alza del dólar, para fortalecer la apuesta agroindustrial como una opción real en estos tiempos. ¿Necesitamos más incentivos?

viernes, 20 de marzo de 2015

¡EL COLMO!

¡EL COLMO!
Germán Palomo García

La permisividad con que los distintos gobiernos municipales, incluido el Distrito  Capital de Bogotá, han atendido el problema del comercio informal desde hace muchos años, ha contribuido al desconocimiento del concepto de espacio público y convertido los centros de las ciudades (parques, calles y andenes), en verdaderas ferias del rebusque, totalmente desmotivantes para el peatón, sea turista o no, y, contrario a lo que se pretende que es facilitar desde la informalidad una manera de garantizar algún ingreso para los desempleados, se torna en efecto negativo para el comercio organizado y el entorno urbano de las ciudades pues acaba el empleo formal y alimenta la trampa de pobreza. Cuando los alcaldes toman acciones para recuperar el espacio público y el sector empresarial ofrece oportunidades de empleo, en todo caso, insuficiente, aparecen algunas perlas  increíbles como esta: Los vendedores ambulantes del Centro de Armenia, le están pidiendo a la administración, según una cadena radial nacional, siete millones de pesos por cada uno para desalojar el centro de la ciudad. Obvio, el censo de ambulantes de esa zona pasó de 30 a 160 y, por el otro, aparecen leguleyos que amparados en supuestos derechos adquiridos pretenden esquilmar a los fiscos municipales. La realidad es que el desempleo disfrazado se ha convertido en una especie de cooptación ya que cuando un informal consigue empleo formal, automáticamente cede su puesto a un familiar o un relacionado. Esto se ha vivido ya en Neiva muchas veces. En una época, en la antigua galería muchos sacaron sus puestos a la calle, arrendaron los que habían recibido de las Empresas Públicas por sumas superiores al arrendamiento que les cobraba EPN y generaron un caos. Por tanto, no resultará extraño que los ambulantes de Neiva que se han tomado literalmente todas las esquinas del centro en masa y apilados adopten semejante entuerto jurídico que no tiene ningún asidero.

Las dificultades de una economía no pueden dar paso a una nueva práctica de los negocios con los informales y los  mototaxistas como vivos ejemplos. Por el contrario, no podemos permitir que la competitividad y la productividad queden relegadas. Sí a la economía de subsistencia y al emprendimiento en la base de la pirámide pero con orden y dentro del respeto a la ley y siempre pensando en el futuro.   

miércoles, 11 de marzo de 2015

NUEVOS INTENTOS CENTRALISTAS

NUEVOS INTENTOS CENTRALISTAS
Germán Palomo García
La presentación al Congreso de la República del Plan de Desarrollo del segundo tiempo del gobierno Santos ha tenido un comienzo atípico. La brecha fiscal que se pretendía cubrir con la reforma tributaria recién aprobada para recaudar los 12.5 billones de pesos ya no lo será por la caída brutal de los precios del Petróleo, lo que aceleró el cumplimiento de la orden de integrar una comisión de expertos tributaristas que formulen una reforma tributaria estructural que, con seguridad nos volverá a esquilmar sin que se logren los objetivos estructuralistas, como tantas veces ha pasado. Esto ha hecho perder confianza en el análisis de un Plan de Desarrollo desfinanciado y puesto en alerta no solo a los congresistas sino a los analistas económicos para descubrir la “letra menuda” contenida en el Plan pues indudablemente deberá recortarse. Una de esas es la que se incluyó para igualar los impuestos a los licores extranjeros con los nacionales dejando en alto riesgo de reducción de los ingresos por la explotación de un arbitrio rentístico que, la verdad sea dicha, ha tenido múltiples variaciones a lo largo de su existencia que, con raras excepciones, es la misma de la existencia de los departamentos. El argumento del gobierno es que es un mandato internacional que Colombia ha incumplido y no se puede mantener esta situación so pena de retaliaciones de los países productores de licores. El monopolio de los licores en cabeza de los departamentos genera ingresos para salud y educación que se pondrían en peligro por la menor capacidad competitiva frente a licores con mayor recordación de marca. Hay un antecedente en las décadas de los setentas y ochentas. Colombianos produjeron en Ecuador, aprovechando el Pacto Andino, un aguardiente que ingresaba a los demás países sin impuestos en virtud de la decisión 57 de dicho acuerdo. El aguardiente rápidamente se posicionó en el mercado nacional y abrió un boquete preocupante. Por fortuna, el negocio no duró mucho tiempo por dificultades propias del Acuerdo de Cartagena, siempre conflictivo.

Con regalías recortadas, más estas amenazas de más reducción de los ingresos territoriales, el gobierno nacional completaría su política centralista de constreñir  más a los entes territoriales haciéndolos más dependientes de las transferencias nacionales. Ahora solo falta que la reforma tributaria le dé la puntada final a las regiones para consolidar un gobierno que se ha dedicado a reivindicar el centralismo como modelo político administrativo. Lo permitiremos?