viernes, 4 de diciembre de 2015

DESIGUALDADES REGIONALES

DESIGUALDADES REGIONALES
Germán Palomo García
La semana pasada se lanzó el Plan Maestro de Transporte Intermodal, PMTI,  proyectado a 20 años y ampliamente justificado por la incidencia de los costos de transporte en los principales productos de exportación (entre 10% y 35% cuando internacionalmente esta misma incidencia no supera el 6%). Además, solo 1.5% de la carga transportada se moviliza por un sistema multimodal lo que confirma la excesiva concentración de carga y pasajeros en el modo vial, según la Cámara Colombiana de la Infraestructura. Por sectores, los productos agrícolas (17%), Mineros (9%), Agroindustriales (27%) y manufactureros (46.1%) son ampliamente dependientes de su movilización por carretera.
A pesar de esta realidad inveterada, subyace una inequidad contra las regiones productoras de los bienes señalados arriba, específicamente los agrícolas y mineros. Esta inequidad nace de la responsabilidad asignada a los municipios en la construcción y mantenimiento de las llamadas vías terciarias, con longitud mayor a los 100.000 kilómetros en todo el país y ampliamente superiores a la red primaria que siempre ha tenido la prioridad. Los entes municipales carecen de capacidad fiscal y financiera para cumplir con esta responsabilidad; ni siquiera los departamentos pueden con las vías secundarias y muchas veces concurren a apoyar a los municipios por lo que el atraso histórico se ha concentrado en estos niveles.

Hoy se están desarrollando los proyectos denominados 4G en los que el Huila resulta beneficiado pero no hay nada con relación a las vías terciarias que mucho necesitamos aquí. Aunque el gobierno reconoce que no hay recursos para todo el PMTI, plantea como hipótesis que al 2022  se contaría con una red primaria completa y los modos férreo, fluvial y aeroportuario como complemento. 119 proyectos están financiados por 62.3 billones según la misma fuente. Pero ni las vías secundarias ni las terciarias que requieren, según el mismo plan, 27.9 billones, tienen financiación asegurada al igual que otras obras que requieren 90 billones más. Conclusión: Seguiremos soportando una inequidad que se espera que las regalías la reduzca pero no hay plata suficiente ahora que soportamos la crisis de precios de los commodities. Entonces, ¿Así, como hablar de equidad regional?

MAL DE MUCHOS… …PROBLEMA GRAVE

MAL DE MUCHOS…   …PROBLEMA GRAVE
Germán Palomo García
En reciente comentario mostré como la economía del Huila registraba estancamiento a pesar de que crecía. Una de las tres causales señaladas es la gran informalidad medida por el subempleo objetivo y subjetivo. Según este indicador, el Huila es el primer departamento en informalidad con 58% de acuerdo con el Banco de la República. Pues esta problemática se ha generalizado mucho más en el país tal como lo publicó El Tiempo en domingo pasado en su separata “Debes leer” y cuantifica en billones de pesos lo que le cuesta al país permitir que las actividades informales se impongan y limiten el crecimiento y el empleo de calidad. Las cifras son dramáticas: seis de cada diez empleos son informales y esto se refleja no solamente en las calles (simplemente recorramos el microcentro para comprobarlo) sino en las condiciones sociales de los trabajadores: Cero cobertura en salud, ingresos por debajo de los legales y ambiente familiar complejo y lamentable; de paso, se transmite al resto de la comunidad todo el problema: Invasión del espacio público, menores ventas oficiales y mal mensaje sobre las “ventajas” de estar por fuera de la Ley, que, lamentablemente, no se ve así sino como un recurso hábil para seguir en la brega lo que le “pega” directamente a los principios y valores sociales. Pero aquí hay que reconocer, tal como lo señala El Tiempo, que la informalidad no solo está en los ambulantes sino en el moto-taxismo y, peor, en las propias empresas que no pagan como debe ser.
Sin embargo, la solución no está en sacar a “bolillazos” a los ambulantes (que son estacionarios en realidad) sino en un conjunto de medidas y estrategias que comprometen a los empresarios y a los gobiernos. Estos a no permitir actividades ilegales e informales facilitando la organización de sus actividades física y financieramente; a controlar el espacio público y no a hacerse los que no ven ni oyen y, en ningún caso, a alentarlas. Los empresarios a ganar en competitividad para ampliar sus negocios y generar empleos formales gracias al mayor valor agregado.

Espero que los nuevos gobernantes territoriales hayan leído el informe de El Tiempo pero, sobre todo, incorporen en sus planes de desarrollo estrategias concretas para incentivar la economía y no repetir programas que son los causantes de los registros preocupantes que refiere la gran prensa.