EL
PIPE Y LA GESTIÓN TERRITORIAL
Germán Palomo García
El mal llamado Plan de Choque,
rebautizado por el presidente Santos como PIPE, Plan de Impulso a la
productividad y al Empleo, viene como anillo al dedo al recién posesionado
gobernador Iriarte quien desde ya tiene que iniciar una gestión fuerte ante el
gobierno central para procurar que buena parte de los recursos destinados al
PIPE se orienten al departamento. De los 5 billones previstos para estimular la
actividad económica, 1.2 billones se destinarán a la eliminación de aranceles,
un impacto muy importante en los costos de producción ya que más de 3000
partidas arancelarias se abaratarán, una contribución indudable a la
competitividad del país. Esta medida se había sugerido en comentario anterior
pues era preferible al otorgamiento de subsidios entre otras razones, para
obligar al esfuerzo de los empresarios, responsables directos de sus unidades
productivas.
El resto de los recursos se
orientará a la vivienda prioritaria (1.5 Billones), a la vivienda para la clase
media (430.000 millones) y vivienda rural (200.000 millones); es decir, 2.1
Billones a vivienda, lo cual garantiza que el sector de la construcción
mantendrá el ritmo que ha venido mostrando y que está generando preocupación
por el nivel de precios lo cual debe seguirse observando. 455.000 millones se
destinarán a infraestructura vial sumados a 200.000 millones para la red
terciaria, un tema de siempre pero que muy poco avance ha tenido pues los
agricultores siguen padeciendo las dificultades de llevar sus productos al
mercado. 280.000 millones se invertirán en el censo agropecuario y otros
100.000 millones para créditos blandos al sector agrícola, el mismo que el
gobernador Carlos Mauricio Iriarte ha priorizado. Finalmente, 188.873 millones
permitirán el aumento del pie de fuerza policial vinculando a 2.500 nuevos
policías. Esto permitirá que la seguridad en Neiva y el Huila se mejore
considerablemente, obviamente, si se hace una buena gestión gubernativa.
Recursos existen. Ahora
queda esperar que el nuevo gobernador y los alcaldes, especialmente el de Neiva
que lo viene haciendo bien en este campo, generen las propuestas necesarias
para “traer platica”, como se dice coloquialmente.