martes, 17 de abril de 2012

EL TLC Y EL VALOR AGREGADO


EL TLC Y EL VALOR AGREGADO
Germán Palomo García
Un efecto inmediato de la mentada cumbre de Cartagena del pasado fin de semana fue la definición de la fecha para la puesta en vigencia del TLC con los Estados Unidos: Mayo 15/12, es decir, menos de un mes. En otras palabras llegó la hora cero para el controvertido tratado de libre comercio que sigue teniendo amigos y enemigos pero que entrará a funcionar gústenos o no. A nivel país, el que se haya definido su puesta en práctica beneficia a exportadores e inversionistas extranjeros que encontrarán atractivo invertir en Colombia para aprovechar el ingreso al gran mercado en términos de poder adquisitivo pues no lo era con el ATPDEA que vencía cada 31 de Diciembre y nadie invierte con base en legislaciones para el corto plazo. Esto lo aprovechó Perú que firmó hace casi tres años el TLC con USA y hasta firmas colombianas se trasladaron a ese país para aprovecharlo. Aquí también tendremos que aprovechar esta situación. Ganamos también los consumidores colombianos que podremos adquirir productos más diversificados a menor precio y mayor calidad. Pero pierde el grueso del aparato productivo que no inicie un proceso de mejoramiento competitivo que exige un acuerdo de tal naturaleza. Mucho se ha dicho sobre el arroz (con horizonte de 19 años para recibir competencia abierta de USA), vehículos de gama media como los producidos en Colombia (que estarán protegidos unos diez años más), pero en general, la competencia vendrá sin ninguna compasión, más temprano que tarde. Por esto resulta oportuno un interesante artículo publicado por El Espectador el pasado Domingo sobre la necesidad de que América Latina, no solo Colombia, “avance por el camino de generar mayor valor agregado en su producción”. La solución está aquí. Si seguimos presenciando exclusivamente el avance de la locomotora de la minería (con inversión extranjera) perderemos el impulso en los otros sectores especialmente el agroindustrial. Para ello, según la fuente, hay que ser más competitivos en logística, avanzar en infraestructura que sigue a niveles críticos, mejorar la educación y alcanzar un Estado más eficiente. Todo esto se ha dicho hace tiempo pero no se ha avanzado al ritmo requerido. La ola invernal ha puesto en evidencia nuestra obsoleta infraestructura y así no es posible competir. El TLC se nos vino y hay que enfrentarlo. Esperar más tiempo es seguir en lo mismo. Un buen momento para poner en práctica el mecanismo promocional de “Invest in Huila” y adquirir nuevo conocimiento pues lo mismo se aplica a nosotros los huilenses.

martes, 10 de abril de 2012

RESULTADOS ENCUESTA EMPRESARIAL DEL HUILA-SEMPRES-4 TRIMESTRE DEL 2011

DESCARGA X ACA LOS RESULTADOS ENCUESTA EMPRESARIAL DEL HUILA-SEMPRES-CORRESPONDIENTE AL 4 TRIMESTRE DEL 2011

COMPORTAMIENTO DEL EMPLEO-mar 2012


COMPORTAMIENTO DEL EMPLEO
Germán Palomo G.
El DANE sigue presentando buenas cifras sobre reducción del desempleo: Un punto porcentual cayó en Febrero frente al mismo mes del año anterior, lo que permitió al gobierno afirmar que pronto volverán a la cifra de un dígito que perdimos finalizando el año anterior.
Pero el tema no va solo en registrar estos buenos guarismos sino en explicar por qué una reducción del desempleo no se nota en todos los sectores y, peor aún, en economías regionales o locales como la nuestra. La respuesta la encontramos en el crecimiento de la economía por sectores y el comportamiento del empleo en los mismos y, desde luego, la estructura del PIB de los territorios. En el caso del Huila, cuyo sector mayoritario en el PIB departamental es el primario o agropecuario, el aporte en crecimiento es pequeño, apenas 2.2% lo cual arroja un mayor empleo del 2.5%. En contraste, la minería (una de las locomotoras de la economía) creció en el 2011 14.3% y el empleo aumentó 14.2% y eso que este sector es de los llamados “intensivos en capital”, es decir, que demandan más equipos y tecnología que mano de obra.
La industria manufacturera, los servicios públicos y la construcción que no son fuertes en el departamento a excepción de la construcción que ha tenido un buen comportamiento en los últimos años, tienen buenos comportamientos en el empleo particularmente en los servicios que con un crecimiento del 1.8 aumentó los empleos 14% (la construcción aumentó el empleo 9.3%). En cambio, el comercio, que es uno de nuestros fuertes, creció 5.9% pero su empleo solo aumentó 4.9%. El transporte también creció más que su empleo (6.9% contra 2.5%).
Estos ejemplos simplemente recomiendan cambiar de manera importante el modelo de crecimiento territorial y nacional y confirma, aunque prematuro es afirmarlo que las agendas internas de productividad y competitividad aún no se construyen pues, aunque el empleo formal creció 4.4% el año pasado, la informalidad sigue pesando y mucho, entre otras razones, porque la capacidad de absorción de mano de obra del aparato productivo es escaso.
Este resulta un buen tema de reflexión en esta Semana Santa donde aún los planes de desarrollo de los municipios y departamentos colombianos no se adoptan todavía y el viacrucis en el empleo persiste.

CAFÉ Y PITALITO: GRAN EJEMPLO


Germán Palomo García

La inauguración de una nueva trilladora en Pitalito hace 8 días; la presencia del Presidente Santos y toda la cúpula cafetera del país en este municipio confirman la importancia que representa para la comunidad cafetera del país el llamado nuevo eje cafetero colombiano conformado por Huila, Cauca y Nariño en el que Pitalito es la nueva capital cafetera nacional. Adicionalmente, se divulgó la noticia de una escuela cafetera para continuar con el cambio de actitud frente a las posibilidades del grano que solo se harán efectivas si se cumple un proceso formativo consistente y pertinente.
Estos hechos demuestran que cuando se traducen los estudios sobre prospectiva regional en programas serios y se asume su ejecución teniendo en cuenta las metas alcanzables, todo se puede. Me refiero al papel que la Agenda Interna de Productividad y Competitividad del Huila, AIPC, le otorgó a la Agroindustria de base tecnológica en el futuro de la región. Los cafés especiales se percibieron como el producto bandera de la agroindustria y gracias al tesón de los cafeteros, eficazmente agrupados en el Comité de Cafeteros del Huila y arropados por la Federación de Cafeteros esta prospectiva se está haciendo realidad. Mucho más meritoria esta gestión cuando el sector cafetero atraviesa por momentos críticos, con reducción de la producción nacional y urgentes requerimientos de renovación de cultivos. No resulta gratuita la expresión del Gerente de la Federación, Luis Genaro Muñoz cuando reconoció que “el Huila salvó al país” refiriéndose, por supuesto, a los resultados de la caficultura huilense en el espectro nacional.
En cuanto a Pitalito, vale resaltar la unidad de su clase dirigente. Hace rato que los laboyanos nos vienen dando clases de pensamiento colectivo y acción futurista, y muestra un crecimiento espectacular no exento, lamentablemente, de dificultades de todo orden pero, precisamente, avanza gracias a la decisión de sus gentes de continuar ganando espacios importantes como el centro urbano más importante del surcolombiano. Neiva tiene que mirar este ejemplo y reaccionar porque los resultados que muestra Pitalito por lo menos la tiene que llevar a reaccionar o se irá quedando relativamente en muchos aspectos frente a la estrella de Laboyos. Me regocijan estos ejemplos porque he participado, como todos saben, en pequeña proporción en el diseño de lo que es posible construir para el Huila, obvio, si así se quiere.